El caso de Adrián Fánegas
Además de Zaira tenemos otra estrella mediática: Adrián, vecino de La Virgen del Camino, tiene seis años y hoy 13 de octubre se celebra en el pabellón deportivo una gala para recuadar fondos destinados a costear la operación a la que tiene que someterse.
Debo acudir constantemente al Hospital de La Paz de Madrid. Mis padres tienen que comprarme otro audífono óseo especial para poder oír que, porque el que tengo ya ha caducado y ya no funciona muy bien. Sin embargo, el audífono no es precisamente barato, cuesta 7.000 euros y tiene una vida útil de tan sólo 5 años. Por si fuera poco, este año debo hacerme una ortodoncia general, que cuesta 18.000 euros. El problema es que ninguna administración pública nos ayuda y mis padres no pueden hacer frente ellos solos a todos estos gastos. Por esa razón, necesito de vuestra ayuda para poder llegar a hacer una vida como cualquier otro niño de mi edad.
Adrián ha sido intervenido en ocho ocasiones, desde los tres meses de edad hasta ahora, a pesar del éxito de las operaciones, aún le queda mucho camino por recorrer. Los gastos a los que se está enfrentando la familia son muy elevados y "no recibimos apenas ayudas", según explica su padre, Alfonso Fánegas, quien se ha dedicado por completo al niño desde su nacimiento, teniendo incluso que dejar su trabajo para poder asistir a las múltiples intervenciones y cuidados que requiere. Hasta el momento, la familia ha conseguido sufragar estos gastos por sus propios medios, pero después de seis años empieza a ser difícil mantener este ritmo. Es por lo que toda la localidad de La Virgen del Camino y buena parte de León se están volcando con este caso.Entre otras cosas, consiste en sufragar los gastos de estancia en Madrid, ya que su tratamiento requiere continuas visitas. Por otra parte, la Seguridad Social no respalda ciertos tratamientos. Adrián cuenta con un vibrador óseo para poder escuchar, algo imprescindible para él, supone un gran sacrificio económico para sus padres y sólo “es una pequeña parte”, ya que, junto con el tratamiento dental al que tiene que ser sometido, la cifra asciende a unos 25.000 euros.